Ya sea que nos guste el
orden o no en la vida, es una parte importancia dentro del mundo y el desorden
nunca existirá sin él. Aunque parezca algo redundante y vago, el mismo universo
surgió del mismo caos y esto sucedió después de la gran explosión denominada
big ban. Es la relación que existe desde el principio del tiempo mismo, podemos
compararla con el bien y el mal. Ambos coexisten en continuo balance para dar
equilibrio al mundo, la teoría dice que aun en el mal hay algo de bueno y
viceversa.
En una ciudad donde las
personas hacían lo que querían, los bandidos podían hacerse un lugar en la
política y los hombres honrados eran asesinados todo el tiempo. Nadie se
preocupaba por ejercer las leyes para vivir, viendo el poco interés de los
encargados del orden y los insuficientes recursos para aplicarla, surgió un
sindicato de ladrones y juntaba lo peor de la sociedad. Estos movían los hilos
debajo del agua, las personas temerosas de ser asesinadas no decían nada y
actuaban cuidando sus pasos. No te podías confían de ninguno, los vecinos te
podían apuñalar mientras dormías, tus mismos hijos se volcarían contra ti y
hacer lo que sea por sacar algún provecho de la situación.
Parecería más una película
que la realidad pero no lo dirías si vivieras allá, aunque este lugar no
difiere mucho y las características son meras coincidencias. Todos estaban
coludidos en algún tipo de negocio sucio, desde el presidente que ocupaba el
cargo más importante hasta el ayudante de más bajo nivel y no era tan fácil de
resistirse a la necesidad. Los lujos de las personas implicadas en estos
negocios, resultaban demasiados atractivos y más si no contabas con educación
para conseguir un trabajo. Súmale tener que mantener a una familia siendo aún
joven, siempre había cierto riesgo de dejarte seducir y solucionar tus
problemas a costa del sufrimiento de otras personas.
La necesidad tiene mayor
prioridad cuando se trata de nuestros problemas, olvidamos a la demás gente
cambiando nuestros valores y hacemos cosas que no son bien vistas ante otras
personas. Leonardo Valencia un hombre de familia casado con una buena mujer,
padre de 3 hijos sanos y una casa propia. Había estudiado para abogado en la
universidad, siempre había tenido mucho éxito en el pasado y hacia lo correcto
para defender a sus clientes. Nunca hubiera aceptado defender a una persona
culpable, hasta hace algunos meses cuando tuvo un encuentro con un hombre y
este le pidió defender a su jefe.
Estaba acusado de tráfico de
influencias, lavado de dinero, soborno de la autoridad, importan armas de
contrabando y ser la cabeza del sindicato de ladrones. Luego de una extensa
investigación de un juez, autoridades de los más altos mandos externas y el
presidente del país tenían las pruebas suficientes para su proceso. Contaban
con las suficientes pruebas para darle cadena perpetua, el caso era lo
suficiente difícil por no decir
imposible y muchos se negaron a llevarlo. Le rogaron que aceptar trabajar para
ello a cambio le daría todo lo que deseara en la vida, aunque para el significaría
traicionar sus valores y vender su almas por así decirlo para salvarse
financieramente. En los juzgados lo apodaban shark porque cambiaba su actitud
para descubrir la verdad, fácilmente podías encontrar a clientes satisfechos y
agradecidos por haberlos defendido.
Hombre: buenas tardes
Leonardo!
Leonardo: buenas tardes!
Señor como se llama usted?
Hombre: mi nombre no es
importante para mi propósito
Leonardo: no me importan sus
planes
Hombre: yo puedo resolver su
vida por completo
Leonardo: usted sabrá que
defiendo solo personas inocentes
Hombre: permítame explicarle
quien es mi jefe? Es un importante hombre de negocios que tiene mucho dinero,
hace importantes obras de caridad y conoce muchas personas con poder.
Leonardo: entonces para que
me necesita?
Hombre: fue encarcelado
injustamente con pruebas prefabricadas pero no es tan fácil salir de esto
Leonardo: me suena fácil de
hacer con todo el dinero que tienen
Hombre: solo vine porque su
reputación lo precede
Leonardo: porque solo saco
los inocentes de prisión
Hombre: acá tengo el
expediente de mi jefe
Leonardo: puede llevárselo
no cambiare de idea
Hombre: tal vez debería
hacer una excepción y sacar algún beneficio monetario
Leonardo: mi integridad no
está en venta
Hombre: es una frase
bastante trillada
Leonardo: su opinión me
importa poco
Hombre: dejare la
documentación con usted
Leonardo: haga lo que desee
con ella
Después el hombre se
desapareció del lugar rápidamente a bordo de un coche negro con vidrios
polarizados, placas posiblemente falsas y dejando cierto aire de misterio.
Aunque me resista a defender a ese hombre en la corte, debo admitir que el
precio me parece algo tentador y las necesidades de mi familia son primero. Que
estás pensando Leonardo? No puedes hacer eso solo por el bienestar de tuyos,
estarías traicionando tus principios y defraudaras a tus hijos con un mal
ejemplo. El camino hasta ahora ha sido difícil de recorrer con muchos
obstáculos, no puedo romper las reglas solo para salvar a uno y sus acciones no
pueden asegurar que sean correctas.
Los días pasaron normalmente
como si hubiera sido un evento aislado, algunas veces las palabras de ese hombre
resonaban en su mente y las cosas no siempre continúan de la misma manera. Su
suerte en los negocios comenzaba a cambiar, tuvo cuatro clientes en los últimos
dos meses y los ingresos no fueron suficientes para sobrevivir. Todos los días
se iba a trabajar con esperanzas de conseguir más casos, la necesidad tiene
cara de perro y las oportunidades no llegarían por si solas. Mientras revisaba
su documentación en la oficina, encontró el expediente del hombre misterioso y
su tarjeta con un número telefónico.
Las deudas de los gastos de
la casa seguían creciendo día a día, termino viéndose obligado a aceptar el
caso por dinero y su orgullo había sido pisoteado para salvarse de las deudas.
Aunque no sabía que el hombre misterioso se ha encargado de espantarle sus
clientes, así se vería obligado a aceptar su oferta para sacar a su jefe o
librarlo de la cárcel por el momento. Hablo con el hombre encargarse de los
trámites necesarios del caso, la corte no quería seguir alargando el proceso
por más tiempo y lo harían a más tardar en dos semanas a partir de la fecha
acordada.
Su esposa nunca estuvo de
acuerdo con que aceptara, aun así no quedaba mucho por hacer en su caso y las
opciones que tenían parecían esfumarse con el tiempo. Les puso una condición
para hacerse cargo de la casa, le pagarían solo el dinero de sus deudas y ningún
centavo más pues quería conservar lo poco de su dignidad. Aprovecho cada día
para hacer una recolección detallada de las pruebas, trataría de invalidar
algunas evidencias de la parte acusatoria y valerse de toda su experiencia
adquirida con los años. Su familia decidió salir fuera de la ciudad por una
temporada, no quería ser víctima de falsas declaraciones de los medios y tener
que dar su opinión sobre la resolución del caso.
El juicio fue en la corte de
la ciudad con un operativo policiaco- militar, no estaban dispuestos a correr
un riesgo innecesario y ser sorprendidos con intento de liberación fallida. Se
reunió toda la burocracia de los más altos cargos, asistieron gente de fuera
con influencias y estaban ansiosos de escuchar la resolución del juez. Sin
embargo de ninguno de los presentes se libraba de él, todos en algún momento
tuvieron tratos directos e indirectos para beneficiarse de sus negocios
ilícitos. El miedo de las represalias con ellos lo hacía inseguros, no había
hombre más poderoso que él y sus contactos lo hacían imposible de evadir,
siempre que quería algo lo conseguía.
Durante la exposición del
caso Mario hizo todo sus esfuerzos para desestimar las pruebas contra su
cliente, varias de ellas fueron anuladas por carecer de un fundamento y otras
porque no se obtuvieron justamente. Las pruebas más sólidas contra él, sobre
supuestas conversaciones con otros traficantes y sus vínculos con el mercado
negro para diversos fines. Se alargó más de lo esperado con todas las
evidencias presentadas, logro reducir su condena de 70 años de prisión a 50
años con buen comportamiento. Los hombres resultaron ser buenos pues cumplieron
su parte del acuerdo, además le consiguió un lugar en una cárcel con poca
seguridad y pronto habría de intentar su fuga.
Mario agradeció haber tenido
la suerte de salir vivo del caso, su conciencia de cierta forma quedo manchada
por su mala obra y las intenciones para llevar el caso no lo justificaban. Dejo
su oficio como abogado por años para dedicarse a otro trabajo, era su forma de
pedir perdón de su traicionar sus valores y pensaba reivindicarse ante su
familia. Tenía que pagar cierta penitencia para librarse de la culpa, olvidar
lo sucedido con el hombre misterio y encontrar su paz interior consigo mismo.